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| cuadro pintado para la habitación de Alejandro |
Está hecha con la técnica del deucopage, fué mi primer cuadro con esta técnica así que tiene unas cuantas imperfecciones, pero de eso se trata; de ir aprendiendo poco a poco.
Lo hice de la siguiente forma:
1. Lo primero fué escoger una servilleta para la ocasión, esta vez fué un tierno osito. Quité las dos capas de abajo de la servilleta y me quedé con la estampada.
2. Busqué el lugar en donde quería hubicar la servilleta y una vez centrada le dí pegamento especial para deucopage por toda la superficie de la servilleta. ( para mi gusto quizá hubiera sido mejor aplicar pegamento en spray en vez del líquido "evitando así esas antiestéticas arruguitas que hay por toda la servilleta"). Hay que extender muy bien con un pincel plano y si es posible de abanico; mojando un poco el pincel y extendiendo desde el centro de la servilleta hacia los lados con movimientos suaves y delicados para que no se rompa la servilleta; que se vuelve aún más delicada al mojarse. ( Si decidimos pegar la servilleta con spray en vez de con pegamento líquido, seguiremos el mismo procedimiento y dejaremos solo la capa que tiene la estampación. Ponemos la servilleta del lado del revés y aplicamos una fina capa de spray por toda la superficie y pegamos en el lienzo)
3. Una vez seca la servilleta, escogemos el color que le queremos dar al fondo, en esta ocasión escogí el azúl celeste. Con una esponja le fuí aplicando en pequeños golpecitos el color, para que quedara igual de uniforme por todos lados, cargué poco la esponja; es más entretenido pero queda mejor.
Cuando llegué a los bordes de la servilleta, esponjaba por los filitos para que quedara desigual por que me pareció que me quedaba mejor así, pero se puede hacer en redondo, en cuadrado o dar la forma que a uno le guste más.
4. Para hacer el nombre, hay muchas formas... bien sea con plantillas compradas o hechas por uno mismo, esta es hecha por mí; cogí un cartón fino que ya no servia y lo metí en la impresora, escogí las letras que más me gustaron y lo imprimí, después recorté a modo de plantilla y lo super-puse encima del lienzo buscando el lugar que más me gustó, con acrilico blanco y con un pincel seco le fuí dando pequeños toquecitos para no cargarlo en exceso, una vez seco perfilé las zonas que me gustaron con rotulador dorado.
Y a pesar de que tiene muchas imperfecciones y varios errores; para mi quedó muy bonito, pues lo hice con amor y con el corazón para un trocito de mi alma llamado Alejandro.
Bueno, pues así queda publicada mi primera Dulce Labor.
